FAMILIA CARISMÁTICA Y ENTORNOS SEGUROS

La Eucaristía junto con el rezo de Laudes ha dado inicio a la jornada de nuestro trabajo capitular. Un día más, hermanas y laicos, hemos abierto el oído para nombrar en plenaria las consonancias y discernir cuestiones importantes de cara a los acuerdos capitulares.

A lo largo del día se han ido tratando algunos de los temas que demandaban información, más precisión o aclaración. Así todos hemos podido escuchar una palabra sobre lo que significa ser Familia carismática; han seguido preguntas y reflexión.

Otro tema tratado estos días, hoy iluminado y conversado en el aula, ha sido el de entornos seguros, vias que permiten que la vida humana esté protegida, se pueda desarrollar y florecer. Se ha dialogado sobre la necesidad de avanzar en los procesos y pasos a dar para hacerlo realidad congregacional.

La hermosa oración preparada por laicos y hermanas de la provincia de América, nos ha hecho contemplar el rostro de uno de los participantes para encontrar a través de su presencia la presencia de la Iglesia, nuestra Amada. Finalmente, uniendo nuestros pequeños trocitos de tela hemos creado un único lazo que ha juntado las dos partes del escapulario. Este ahora queda con nosotras como signo de la protección e intercesión de María, nuestra Reina, Hermana y Madre.