DÍA SÉPTIMO DE LA NOVENA

La paciencia es una virtud que implica la capacidad de tolerar situaciones difíciles, estresantes o adversas sin perder la calma y la serenidad. Es la habilidad de esperar con tranquilidad y perseverancia, sin sucumbir a la frustración.

La paciencia no es una cualidad innata, sino que se adquiere y se desarrolla a lo largo del tiempo a través de la práctica constante.  Así, nos ayuda alcanzar nuestras metas y nos procura la felicidad. Nos permite escuchar con atención, comprender las necesidades de los demás y responder de manera empática y comprensiva. Nos permite también enfrentar los desafíos con serenidad. Por lo tanto, ¿cómo evitar reacciones impulsivas que puedan llevarnos a cometer errores o actuar de forma irreflexiva frente a las adversidades?

El padre Palau nos interpela: «Venida la tribulación y la persecución, ¿la recibes con ánimo igual, invariable, inmutable y firme?»  (MM 19,4), «Venida por causa de tu virtud la persecución y la contradicción, ¿qué haces?, ¿desfalleces?, ¿retrocedes?» (MM 17,4).

Nuestra vida es una alternancia del bien y del mal, del fracaso y del éxito, de la luz y de la sombra. Por eso la virtud de la paciencia es básica para alcanzar nuestros objetivos de manera gradual y constante a través de pequeños esfuerzos y acciones diarias.

El padre Palau nos asegura que «sostener, aguantar, soportar y sufrir las penas y persecuciones que por causa de la Virtud nos vienen, es cosa de la paciencia» (MM 19, 2).

  • ¿Cómo vivo la paciencia en mi vida diaria”?
  • ¿De qué manera el ejercicio de la paciencia me ayuda en el camino de la santidad?

Oración por la pronta canonización de nuestro Padre Fundador

¡Oh, Dios, ¡Padre Omnipotente y Misericordioso! te damos gracias y te bendecimos porque infundiste en el corazón del Beato Francisco Palau un amor singular a la Iglesia, Cuerpo místico de Cristo. Le descubriste su belleza figurada en María y lo iluminaste para servirla con la oración y el apostolado. Concédenos su pronta canonización en la Iglesia y ahora la gracia especial que por su intercesión te pedimos. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.