La Asamblea sigue su curso.
¿Cómo hemos caminado en estos cuatro años en las respectivas provincias? ¿Qué urgencias y llamadas percibimos? ¿Cuáles son las visiones del futuro más o menos próximo? Estas y otras preguntas han brotado en las reflexiones y resonancias que este miércoles han despertado los informes de las provinciales de África, América y Europa, y el de la delegada de Asia.
Las Asambleístas han iniciado también la reflexión sobre las aportaciones de los equipos provinciales de pastoral o de gestión. Aportaciones valiosas, porque responden a la pregunta sobre lo que consideran necesario en el aquí y ahora para, como equipo, seguir respondiendo a la misión encomendada, tejiendo comunión, fortaleciendo, actualizando el diseño, todo para dar respuestas actuales, acertadas, que abriguen, vistan y cobijen.
Todo lo compartido a lo largo de la jornada y en la asamblea plenaria a última hora de la tarde, esperamos redunde en el bien de la Iglesia entera. La proyección misionera, el deseo de responder a las necesidades urgentes según el carisma que hemos heredado.
Además de la noticia, algunas imágenes de los espacios asambleares.
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